
Está demostrado que
el tener las puertas abiertas de un local aumenta la afluencia del público, es
una invitación al cliente, actuando como un escaparate y permitiendo ver el
interior de la tienda, pero esto supone una pérdida energética muy
considerable.
Según
el Reglamento de instalaciones térmicas R.I.T.E
en la I.T. 3.8.4, considera que se debe regular el sistema de apertura
de puertas de los edificios y locales climatizados, con el fin de impedir
que estén abiertas permanentemente con el consiguiente despilfarro energético
por las pérdidas de calefacción...